viernes, 13 de junio de 2008

corriendo

-No sólo por las venas corre la sangre.- Una sonrisa macabra apareció y de repente la blancura de sus dientes me empezaron a molestar.

Mi garganta pidió a gritos que cesara, que si evitaba las cosas por más tiempo ni siquiera me ibaa a quedar sangre para desperdiciar.-Tenés frío?-

-Siempre- volví a pararme, estaba agobiado, sofocado, el aire parecía no alcanzar ("te lo dije") y yo seguía sin dejar de enumerar: uno, dos, tres, infinito, infinito dos, infinito tres; y sé que si alguien me hubiese enseñado francés por ahí andaría, dando besitos franceses a las que sonríen maquiavélicamente mientras leen libros sobre la muerte.

1 comentario:

Anónimo dijo...

vos pone el texto y yo lo sitmepo sverbales xD jajajaj