jueves, 7 de agosto de 2008

fccn!

Cuando la ficción parece realidad mis ojos se cierran y transforman todo en un mundo lleno de esa blanquísima nieve que tanto frío me proporciona, ese frío que penetra mis huesos y me hace pensar hasta en las ficciones mas dolorosas y en los sueños por cumplir. Hoy dormí y traté de dejar de alucinar, de preguntarme cosas que ya se, de parar un poco con el sentimentalismo que tanto detesto y que ahora parece adueñarse de cada uno de mis actos.

Cuando la ficción parece realidad siento que te siento, que no hay nada mas que azulejos que nos ocultan, bah, te ocultan. Ganas de gritar, arrojar, estupidizar toda la situación; ganas de no tener ganas y volver a meterme en mi cama a llorar por tonterías que no merecen tanto escándalo, por errores que no merecen tanto escándalo (vos no merecés siquiera algo de escándalo).

Cuando la ficción se hace realidad yo me tomo todo con pinzas y vuelvo suspirando entre lo blanco y negro, entre la espada y la pared, entre tus mentiras y las mías, entre la música psicodélica y una servilleta que utilicé rodeada de velas para marcar algo que no valió la pena (vos no vales la pena).

Cuando mi ficción se hace realidad te veo partir con zapatillas baratas y suena la música y delirio en mi cabeza. Cuándo, cómo y porqué, la ficción se volvió realidad para arruinarme; que feo ficción cuando te ponés en mi contra (te amo, te odio, dame más), que fea ficción, que fea realidad, que feo delirar sin sentido y pensar y pensar y pensar.

4 comentarios:

pipipil dijo...

Es una pena que como boludas que somos las mujeres sigamos confiando en esas cosas llamadas hombres, que muchos de ellos, más de la mitad, no vale la pena, la mayoría son príncipes azules que se destiñen, espero que llegue para vos y espero que llegue para mí, uno que sí valga la pena, te quiero hermosa!

Guillôm dijo...

seguí mi ejemplo, cuando aprendés a no querer más que a tu propia sombra, y tu ego empieza a aumentar de tamaño, el que se fue sin que lo hechen, vuelve sin que lo llamen.
Mirá me inspiraste y me hiciste escribir. Gracias totales.

Florr dijo...

que hermoso blog

Anónimo dijo...

cuando mi ficcion se vuelve realidad casi siempre las cosas terminan mal.
cuando la realidad sigue su curso todo está normal, aburrido, pero normal